22.8.08

queridas amigas y creadoras:


mi intención para esta tarde era escribir un ensayo más o menos crítico sobre las implicaciones políticas y económicas del trabajo que hemos hecho en el taller. sin embargo, al momento de sentarme a escribir, me ganan los afectos. las cosas que me nos unen son mucho más que las teorías de política económica que definen la posición de las mujeres en el mercado editorial. yo dejé de leer cosas al respecto cuando decidí que la revolución era algo que quería hacer con las manos, en las pequeñeces de la vida diaria, en lo doméstico, en las relaciones interpersonales. dejé de hablar de política cuando descubrí que mis compañeros en la lucha estudiantil no aplicaban los principios a su cotidianidad. y me alejé para vivir como me diera la gana. hice maletas, me fui de casa... para mi gran suerte, y como el destino tiene el sentido del humor que tiene, me encontré con ustedes, y luego con la casa feminista, y luego con un lenguaje mágico que se ajustaba más al tipo de revolución poética que yo quería generar en mi vida diaria.

les confieso que cuando empecé el taller no tenía ni idea, NI IDEA, de lo que estaba haciendo. fuimos el conejillo de indias unas de otras. sin embargo, en el trabajo semanal fueron germinando las herramientas necesarias para materializar las metas y las loquísimas ideas que nos impulsaban. poco a poco, fui entendiendo un poco mejor la magnitud de lo que estábamos haciendo. por fin, pude asumir mis valores políticos en la vida real. lo nuestro era (es) una lucha creativa contra los mecanismos del mercado, contra los medios de producción, contra las nociones de lo que debe ser el trabajo de mujeres. tomar control del proceso, asumir la propia voz, participar de un colectivo que construye conjuntamente no sólo productos grupales, sino que también promueve el desarrollo de la expresión y el crecimiento individual respetando las diferencias y capacidades de cada cual, es una gesta transgresora.

estoy orgullosa de pertenecer a esta inciativa, de haber podido compartir con ustedes un poco de lo que había aprendido con otras maestras que se habían cruzado en mi camino, de haber llegado a esa casa de brujas inteligentes que viajan, que hacen pan, que tienen en la punta de la lengua el don de la palabra, los hechizos, los conjuros.

sigan haciendo magia, vuelvo pronto. no hay lugar en el mundo como el que nos hemos inventado. gracias.

con todo el amor,
Nicole
[carta para ser leída en la presentación de los libros del taller artesanal en la Casa Feminista en La Roma, Mexico, DF]

4 comentarios:

Sor Juanais dijo...

AY AY AY! LLORÉ CABRONA!
TU PENSARÁS: ANAÏS LLORA POR TODO
Y TAL VEZ SÍ, MIS LAGRIMALES DE COCODRILO NO PUEDEN EVITARLO...PERO A VECES, TANTA HERMOSURA, DUELE.
AMO RECORDAR AQUEL DÍA QUE ME INVITASTE AL TALLER...¿QUIÉN DIRÍA BONITA, HERMOSA, QUE TANTO PASARÍA?
TE ADORO.

Anónimo dijo...

anaïsla llora por todo :p, por algo está rodeada de agua

yo me acuerdo de mi exquisita torpeza principiante de principiante persona encuadernadora, ahora disfruto de mi exquisita torpeza un poco más perfeccionada

teché mucho de menos, abanicole

arigato por todo

ai lol llu

Anónimo dijo...

anaïsla llora por todo :p, por algo está rodeada de agua

yo me acuerdo de mi exquisita torpeza principiante de principiante persona encuadernadora, ahora disfruto de mi exquisita torpeza un poco más perfeccionada

teché mucho de menos, abanicole

arigato por todo

ai lol llu

Mara Pastor dijo...

que hermoso. yo me siento muy dichosa de haberlas tenido tan cerca. te haberlas abrazado y hecho monstruo con ustedes en los peceros. que al megafono no se le gasten las pilas nunca!
abrazo a las chicas y a ti nicolaza en la isla desarraigada, cuanto te entiendo. aca en los esteits la ciudad me recibe nueva.