17.6.09

madrugada

la madrugada es un manuscrito con la caligrafía torcida.
la tinta de la noche desaparece poco a poco.
el sueño invade el color de las palabras que la nombran.
cuando el sol abre los ojos, ella se asegura
de borrar sus pistas temblorosas.
yo la he visto de frente pocas veces,
pero suele dejar sílabas rotas en todas mis libretas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

cuando llega la madrugada llega el polvo y me vuelvo alérgico... aachu

heey, no le he podido ni mirar por mis obligaciones con las cosas del mundo, pero pero, pronto ¿no?

y las de la foto son mis señoras bisabuelas contemplando la bella cananea, más o menos en los tiempos del azafrán