17.7.09

abrir caminos

una vez, hace casi tres años, una bruja de nombre zulema me hizo un regalo. eran unas bolsitas de telas de colores que tenían tabaco adentro. para abrir caminos, me dijo. entonces yo, muchos menos perceptiva y serena de lo que soy ahora, pensé que ese regalo era la llave para ir a donde yo quisiera. sin embargo, los caminos se han ido abriendo solos, y nunca son los caminos que decido yo. el azar o el destino, todavía no sé, encuentra la manera de llevarme a lugares sin sospecha, que terminan siendo el sitio al que tenía que llegar. ahora son días de caminos sorpresa, zulema, y agradezco tu regalo.

1 comentario:

Lorena Illoldi dijo...

veo la mías mientras escribo esto, cavilando en cuan cierto es todo lo que acabas de decir...

desde entonces y hasta ahora
todas aquellas brujas
siguen muy presentes
oh sí